Capítulo 227
Probando la Tentacion – la visita Nocturna del gerente General casto
apÃtulo 227 Fabián salió del hospital
Después de esa noche, Fabián descubrió muchas cosas.
Dado que estar con él le causaba tanta agonÃa, bien podrÃa darle libertad.
Su vida pasada siempre habÃa sido involuntaria. Originalmente pensó que su llegada podrÃa cambiar la trayectoria de su vida y ayudarla a superar las sombras del pasado, pero ahora parecÃa que estaba realmente cansada.
Fabián podÃa sentir sin lugar a dudas el cansancio de Myla estos dÃas; Estaba completamente agotada y ya no podÃa fingirlo.
¡Eres superfluo! Date prisa y divorciate. Celebrar una boda es sólo engañarte a ti mismoâ.
Después de que John terminó de hablar, se encontró con los ojos sombrÃos de Fabián.
Finalmente, suspirando, John dijo: âEstá bien, arreglaré tu altaâ.
Al salir de la sala de Fabián, en lugar de salir directamente del hospital, Myla fue al jardÃn del hospital, el lugar que a su madre le encantaba visitar. Debido a que Katherine pasó casi la última parte de su vida en el hospital, este lugar se convirtió en el único lugar para llorarla. .
Cansado de caminar. Myla estaba sentada en el banco del pabellón, observando a los pacientes ir y venir, acompañados por sus familias.
Pensando en ella mismaâ¦
Siempre con la excusa de estar ocupada con el trabajo y con poco tiempo, no venÃa a acompañar a su madre todos los dÃas.
Dios le dio su retribución a cambio, y ella ni siquiera captó la última mirada de Katherine.
DeberÃa resentirse, odiarse por no escuchar a su madre, odiarse por seguir el antiguo camino de su madre al final.
â¡Mami! ¡La inyección duele, quiero un abrazo!â
De repente, una voz gordita llegó a los oÃdos de Myla.
Siguiendo el sonido, vio a una niña haciendo pucheros y actuando linda con su mamá, señalando el lugar de la inyección. Sus dos grandes ojos parpadearon, especialmente
CapÃtulo 227 Fabián se fueâ¦
La madre se inclinó, la levantó y la besó en la mejilla: âBuena nena, después de que bajemos la fiebre, nos iremos a casa. Te lo prometo, llevaremos
ir al parque de diversiones, ¿de acuerdo?â
â¡Hurra!â La niña instantáneamente olvidó todo el dolor y sus ojos llorosos
ocultar su felicidad.
Al mirarlo, los ojos de Myla también se pusieron rojos.
Ella⦠también alguna vez deseó tener una madre asÃ.
no pude
Poder actuar como mimada y linda frente a su mamá, ser obstinada y llorar frente a su mamáâ¦
En su memoria, Katherine rara vez sonreÃa.
¡Incluso hubo un momento en que Myla se resistió! Entonces, cuando regresó al asilo de ancianos donde vivÃa su madre después de trabajar, la enterró. ella misma en su tarea, sin hablar ni hacer contacto visual con su madre.
Porque siempre que su madre hablaba era para criticarla, no permitirle tener contacto con chicos, no permitirle tener citas.
A pesar de estar en la pubertad, se levantaba antes del amanecer todos los dÃas. caminaba penosamente a la escuela, trabajaba a tiempo parcial después de la escuela y tenÃa una gran cantidad de tareas y tareas de estudio cuando regresaba a casa. ¿Cómo podrÃa ella tener tiempo para salir?
repuesto
ParecÃa que en toda la clase, ella solo miró a Fabián unas cuantas veces más, porque él era su compañero de escritorio.
Después de graduarse de la universidad y comenzar a trabajar formalmente, inconscientemente comenzó a rechazar cualquier contacto más cercano con los hombres. No era algo que ella controlara, sino un hábito.
Cada vez que se sentÃa sola. Myla estaba resentida con su madre. ¿Por qué le inculcó esos pensamientos desde una edad temprana? Haciéndola tan insociable.
Pero ahoraâ¦
Sólo querÃa que Katherine volviera a la vida.
De cualquier forma posibleâ¦.
Myla extendió la mano y tocó suavemente su abdomen. Niña, si te doy a luz, ¿te resentirás conmigo en el futuro?
CapÃtulo 228 Tu mamá no murióâ¦.