Chapter 176
Resistiendo al amor de Mi Ex-Marido
CapÃtulo 176 Al escuchar eso, Pedro se mantuvo imperturbable. -¿Ella también está aquÃ? El profesor Flores probablemente no esperaba esa respuesta y se quedó en silenpor un momento.
Bella sabÃa que el profesor Flores tenÃa malentendidos sobre ella y Pedro debido al banquete anterior. Pensó que ellos dos estaban jugando el gato y el ratón, por eso hizo ese comentaen tono de broma. Para evitar que el profesor Flores se sintiera incómodo, Bella saludó con una sonrisa. â Profesor Flores. Al escuchar su voz, Pedro giró la cabeza hacia ella.
Sus ojos oscuros seguÃan siendo profundos y tranquilos, sin revelar emociones.
Bella lo ignoró y se dirigió al profesor Flores. -Lamento haberlos molestado hoy.iré primero.
Dicho esto, Bella ni siquiera entró a la oficina, se fue directamente.
Cuando llegó a su coche, Pedro también se acercó en su dirección.
¿No habÃa ido a ver al profesor Flores por asuntos importantes? ¿Cómo salió tan rápido? Bella no tenÃa ánimos para preocuparse por él. Abrió la puerta del conductor para subir al coche, pero Pedro se interpuso en su camino.
-¿Realmente viniste a ver al profesor Flores por la representación? -¿Hay algún problema? raen Pedro la observó. -Si ese es el caso, ¿por qué te vas tan rápido? ¿No eres experta en aprovechar las oportunidades? ¿Pedro estaba insinuando que la ayudarÃa? Bella encontró eso algo ridÃculo.-Según tengo entendido, este proyecto es de la Directora Blanco. ¿En qué oportunidad puedo aprovechar? Pedro frunció ligeramente el ceño. -¿Anna es la directora del Banco de Inversión de Expedición, vino a negociar negócios y eso también te afecta? ¡Anna no le afectó, él fue quienafectó a ella! Al recordar los pendientes de diamantes rotos, Bella se sintió molesta en su interior.
-Pedro, ¿tienes algo más que hacer? Si tienes algo, dilo; si no, déjen paz. No quiero escuchar tus tonterÃas. Dijo Bella, imitando las palabras de Pedro de antes.
El tono y la expresión éran muy similares.
+15 BONUS Efectivamente, el semblante de Pedro se volvió sombrÃo. Hizo un gran esfuerzo por contenerse y preguntó: -¿Por qué no respondiste mis llamadas? Bella respondió con una risa frÃa: -No necesitas haceesa pregunta. ¿No es algo que haces con frecuencia? Seguro que tienes más respuestas y razones que yo.
Pedro aguantó la paciencia. La última vez que no contesté tu llamada fue durante una reunión. Cuando salÃ, ya habÃas ido a mi oficina.
-¿Tu memoria está fallando? ¿La única vez que no contestaste mi llamada fue la última vez? -preguntó Bella.
Antes, cuando Bella le llamaba o le enviaba mensajes sin importar el momento, él se cansaba y simplemente no respondÃa.
Frente a los viejos asuntos, Pedro no pudo evitar recordar lo que Manuel le habÃa dicho.
Si una mujer se enfada y no se le apacigua a tiempo, sacará a colación todos los asuntos pasados de enfado. En ese momento, Pedro lo estaba experimentando.
No podÃa describir exactamente lo que sentÃa en su interior, pero habÃa molestia, enojo y frustración.
Pedro sabÃa que Bella estaba resentida con él.
Pero él estaba haciendo todo lo posible para enmendar las cosas, ¿por qué ella aún se aferraba a ello? -Bella, ¿por qué finges que no te importa?
Dijo Pedro, frunciendo levemente el ceño-. Si no quieres ir al Banco de Inversión de Expedición, ve a la oficina del presidente de la sede central. ¿Estás satisfecha ahora? Bella: ¿? -¿Estás loco? ¿Cómo puedo fingir? ¿Cuándo dije que querÃa ir a la oficina del presidente?
-Finges que no te importo en la superficie, pero siempre te involudras en todo lo que tenga que ver conmigo. ¿Acaso no es as� Today's Bonus Offer X